19 de marzo de 2014

Simulacro 5

Después de tres sábados de descanso en lo que a simulacros se refiere, vuelvo a pegar el culo al asiento durante cinco largas horas para intentar estrujar mi cerebro e ir depurando un poco la técnica de examen.

Como siempre, una comida ligera para no deplecionar la cabeza de sangre y un cafetillo para despertar, ponen en marcha el ritualismo de los sábados de simulacro. Llego a la sede, y como en la vez anterior, me toca esperar al segundo llamamiento debido al revuelo que se forma en la entrada de las aulas y que hace imposible enscuchar como nos llaman. Me llaman, me siento y me pongo a hablar con una compañera de clase.

Cuál es mi sorpresa cuando escuchamos a dos chicos de delante decirle a un tercero "Nosotros ya lo hemos hecho, pero venimos a ver si después de corregirlo hemos mejorado algo". Y es ahí donde me pierdo. Ya me habían comentado que este simulacro era exactamente el MIR de esta convocatoria, pero por mucho que se supiese cuál era el contenido del examen, lo último que se me pasaba por la cabeza era que alguien fuese capaz de dedicarse a hacerlo dos veces. ¿Será que no tuvo suficiente con hacerlo una vez? A mi la verdad es que se me ocurre un par de ideas en las que invertir el sábado por la tarde mucho mejor que en repetir una cosa que ya he hecho. No sé si es motivación o autoengaño, pero la verdad es que no pude más que compadecerme de la pareja.

Llegan las 16.00 y empezamos a hacer un examen que ya sabíamos que había sido calificado como el más dificil de las tres últimas convocatorias. Y quizá sea eso lo que agudice el ingenio, o lo que me resigne a hacer acopio de trucos y técnica de examen más que de conocimiento puramente teórico. Aprovecho y, además de seguir rigurosamente la estrategia de los anteriores simulacros, pongo en práctica los trucos que se nos han comentado por activa y por pasiva. Me encuentro con preguntas muy sencillas, pocas de dificultad media en las que razonando puedes sacarlas, y otras cuantas de dificultad elevada en las que solamente puedo defenderme a duras penas. Voy contestando y pasando a la plantilla tranquilamente, y cuando termino con la famosa curva de Kaplan-Meier, me levanto y me bajo a respirar el aire de una noche de sábado. Respiro y pienso.

Pienso en el cansancio, en el examen, en los amigos que lo vivieron como su MIR real, en donde me voy a tomar la cerveza postsimulacro, pero sobre todo, en la curiosa pareja del aula. No logro entenderlo. No sé por qué vuelven a hacerlo y me hubiese gustado preguntárselo. ¿Será que creen que haciendo los simulacros dos veces van a mejorar rendimiento? No sé. Pero bueno, lo que sí me queda claro es que de momento no es una prioridad el despeñarse con la preparación. Estos meses que quedan hasta la segunda vuelta, y aunque me consta que compañeros míos están estudiando como si estuviésemos a 4 días del examen, me los estoy tomando con mucha calma en el tema de sentarse a estudiar.

Para eso, ya habrá tiempo más adelante.


A.

4 comentarios:

  1. Reconozco que a mí también me lía un poco la cabeza gente así... Y que muchas veces tengo que aislarme y reafirmarme en mi idea: NO HAGAS NADA... No hagas nada hasta la segunda vuelta. Vas a clase. Haces los simulacros y que sea lo que Dios quiera... Es una fase de contacto...

    Y eso es lo que he hecho hasta ahora... Me sorprende que la gente "comparta" simulacros y los haga medio en grupo, sospecho que hay gente que "falsea" resultados (pero no me atrevería a acusar a nadie que corro el riesgo de equivocarme), sé que hay gente estudiando...

    Peeeeero... Relax... aunque no lo entienda... jaja

    A mí también se me ocurren muchas mejores maneras de pasar un sábado... =)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo pienso lo mismo que tú. He visto a más de uno hacer los simulacros en grupo, o estar hablando durante las 5 horas. Pero bueno, creo que en esta carrera nunca me dejaré de sorprender con lo que es capaz de hacer la gente por ganarse el "reconocimiento" y la admiración de la masa.

      Relax hasta segunda vuelta, que ya habrá tiempo d eestudio hasta cansarnos jejeje

      Un saludo Irene

      Eliminar
  2. No hagáis esas cosas a estas alturas que acabaréis locos (aunque tomárselo con calma no es garantía de salud mental en la cuarta vuelta jajaja) !!! Mucha tranquilidad!! La segunda vuelta es extremadamente larga y da tiempo para todo, todo, todo... y más! De momento hacer los simulacros es lo único que os debe preocupar. Es lo que realmente marca la diferencia en el resultado a estas alturas.

    Aún tengo el examen en una esquinica de la habitación. Puede que más que difícil fuera raro... aunque creo que de momento lo tengo muy precoz como para poder valorarlo.

    Te voy leyendo ;)

    ResponderEliminar
  3. Yo vi el otro día a un grupito haciendo un simulacro con el Harrison al lado...y pensé ¿¿qué sentido tiene eso?? opino como tú, en esta carrera nunca dejaran de sorprenderme! :)

    Un saludo

    ResponderEliminar